El biniou, llamado también biniou-bihan (pequeña cornamusa) o de manera peyorativa biniou-kozh (vieja cornamusa), es la cornamusa tradicional de Bretaña y posiblemente el instrumento tradicional más extendido en la zona junto con la bombarda. Se tiene constancia de su existencia desde antes del s. XVII. Estos dos instrumentos conforman la formación básica de la música tradicional bretona: el sonerion (músicos tradicionales, en bretón), un dueto de bombarda y biniou que encuentra su espacio de actuación habitual en fiestas populares o fest-noz (literalmente, fiesta de noche).

Desde principios del s. XX, el biniou ha entrado en competencia con el biniou braz o gran cornamusa –la gaita escocesa–, que por su popularidad, características tonales y potencia es un instrumento idóneo para tocar en otra formación musical bretona muy popular, el bagad. El bagad lo forman una gran cantidad de músicos –hay bombardas, gaitas escocesas, percusiones, instrumentos eléctricos como guitarra y bajo…– y bebe de la música tradicional bretona, pero los arreglos están adaptados a los cánones de la música actual.

Como todas las cornamusas, el biniou consta de saco, soplador, puntero y un bordón que se apoya en el hombro, como es habitual en el norte de Europa. El biniou tradicional es de madera de boj, tiene la caña doble y no dispone de anillados metálicos. La digitación es abierta con la particularidad, además, de no tener agujero para el dedo pulgar en la parte trasera del puntero.

La principal característica del biniou es su tamaño. Podríamos decir que es una gaita en miniatura porque tanto la piel como el puntero y el bordón son bastante más pequeños que en cualquier otra cornamusa. De hecho, es una de las más pequeñas de Europa y de las más agudas del mundo: suele ser una octava superior al resto de cornamusas. Hasta el s. XIX el puntero o levriad del biniou era más grande, por lo que doblaba el registro de la bombarda, su acompañante en el sonerion. A principios del s. XIX el puntero se reduce y su registro de agudos se vuelve altamente incisivo y algunas veces poco agradable al oído en comparación con otras cornamusas más suaves. Esta particularidad en su tamaño hace que a menudo se la pueda ver sonando presionada con los dos brazos sobre el pecho del sonador.

El modelo que utilizamos en Els Berros de la Cort es un biniou del lutier bretón Gilbert Hervieux (http://www.hervieuxglet.com) afinado en do (sol a la tónica). Aunque no es la afinación considerada tradicional (si bemol), la comunidad de sonadores bretones ya hace años que se ha adaptado a las nuevas posibilidades que ofrece el hecho de tener el instrumento tradicional del país disponible en las afinaciones más corrientes para poder tocar con otros instrumentos (sol, la y do) y en una escala temperada.